Los beneficios del omega 3 a medida que envejecemos
24
Abr
A medida que cumplimos años, nuestros cuerpos necesitan toda la ayuda que puedan obtener. Nuestra memoria, articulaciones, corazón y metabolismo pueden mostrar signos de desgaste a medida que pasan los años. Y aunque muchas personas conocen los beneficios de los Omega 3 para la salud cognitiva, es posible que se sorprendan de las muchas otras formas en que el DHA y el EPA nos ayudan a medida que envejecemos.
Los omega 3 no solo mejoran la salud de nuestro cerebro, sino que también apoyan la salud cardiovascular, nuestro sistema inmunológico y nuestras articulaciones.
Los EPA y DHA son ácidos grasos esenciales. Son fundamentales para nuestro bienestar general, pero nuestros cuerpos no pueden sintetizarlos por sí solos. La única forma de obtener las cantidades adecuadas es a través de nuestra dieta. Mucha gente podría pensar en el aceite de pescado como un suplemento para las mujeres embarazadas o para los niños que no tocan el pescado o los mariscos. Si bien los Omega 3 son bien conocidos por su impacto en el desarrollo de las mentes, son igualmente útiles para mantener otros sistemas críticos del cuerpo a lo largo de la vida.
DHA PARA LA SALUD CEREBRAL. Nuestros cerebros están hechos de densas concentraciones de grasas lipídicas. Las grasas constituyen alrededor del 60 por ciento de nuestra masa cerebral y, específicamente, el 40 por ciento de nuestro cerebro está compuesto por DHA.
Pero no es sólo en el cerebro está conformado por el ácido graso DHA. El DHA representa aproximadamente el 50 por ciento de los bordes alrededor de nuestras neuronas, lo que explica por qué puede ser tan útil con la memoria, la cognición y el funcionamiento de nuestro sistema nervioso. Además, el ácido docosahexaenoico (DHA) constituye aproximadamente el 60 por ciento en la retina, por lo que es esencial para el apoyo de la visión.
EPA PARA LA SALUD DEL CORAZÓN. Cuando somos más jóvenes, no pensamos mucho en la salud de nuestro corazón, pero a medida que avanzamos hacia la mediana edad y más allá, mantener una salud cardiovascular óptima se convierte en una preocupación.
Cuando una dieta constante de pescados grasos no es una opción viable, suplementar con Omega 3 de alta calidad puede beneficiar nuestro cerebro, sistema nervioso, sistema inmunológico, corazón, articulaciones y piel.
