La mujer, emociones y el cáncer

Hablar del cáncer, específicamente de cáncer de mama, es referirse a un  cúmulo de emociones y sentimientos, es recorrer su historia, mirar su feminidad y tocar su sensibilidad; el día de hoy no queremos entrar en definiciones sino como abordamos este momento.

Es importante recalcar que las emociones no son buenas ni malas, simplemente son mecanismos indispensables para el vivir. ¿Qué pasa con los sentimientos y las emociones que vive una mujer cuando le es diagnosticado cáncer de mama?

Al inicio, la primera reacción es un choque, caemos en crisis no alcanzamos a definir qué es lo que está pasando, desde la negación, la confusión y el necesitar apoyo y contención para conocer las opciones que abren la posibilidad de saber que existe esperanza, la esperanza de seguir viviendo. Físicamente, necesitamos inhalar profundamente para sentir la expansión de mi pecho, lo que me va ayudar a abrirme a despertar mi valentía y ver el abanico de opciones que sí existen.

El vivir las emociones en este proceso y cómo puedo aprender a liberarlas es importante para poder enfrentar las distintas fases de esta enfermedad.

El miedo, el enojo, la vergüenza, la tristeza, la culpa, son válidos, lo importante es que aprendamos a identificarlos, a reconocerlos, el darse permiso de llorar, gritar, estar triste, hará que el proceso sea menos agobiante. Es parte del camino para volver a una estabilidad  y la claridad para darle la justa dimensión a la enfermedad y tener la mejor de las actitudes para enfrentarla.

Medita y respira, aprende a expandir el pecho, los pectorales genera: fuerza,  energía, seguridad, el saber que puedes, y de ahí manifestar la mejor de las actitudes para vivir la enfermedad. Una buena respiración relaja todos tus sentidos. Modificar hábitos que te hagan mover, caminar más, hacer ejercicio como el Yoga, natación, ejercicios aeróbicos que me lleven a expandir el pecho y abrirme a la alegría. Para prevenir el cáncer o luchar contra él es importante seguir una dieta equilibrada y, en especial, alimentar la flora bacteriana del intestino con probióticos, verduras, frutas y fibra en general. Comer mejor y utilizar complementos  que ayuden a activar cuerpo y la mente.

Haz uso de todo tu optimismo, de tu sentido del humor, aprender a tomar decisiones prácticas: Se trata de darse cuenta que si ya no tienes  algo, puedo tener otra cosa, sustituir, abrirte a sentirte mejor y trabajar mucho con el sentido del humor y del optimismo para superar la vergüenza, proteger la autoestima y la necesidad de ser tratada digna y respetuosamente, para curar la tristeza y dejarte consolar. Buscando buenas compañías, siente el apoyo y el cariño de tus seres queridos.

Las emociones no son eternas, vienen, cumplen su misión y se van. Para esa salida sana nos podremos ayudar mediante la respiración, el silencio, la meditación, la oración y tomar acciones para estar mejor.

Ponemos a su disposición este blog con noticias, consejos e información valiosa de belleza y salud. En Polisalud usted puede adquirir desarrollos científicos para su bienestar que cuentan con el respaldo de investigadores egresados del Instituto Politécnico Nacional. Para mayor Información de siga el link Polisalud, o llámenos a los teléfonos 01(55) 2622 9599.